
México está en camino de reducir su jornada laboral de 48 a 40 horas semanales, un cambio histórico que busca mejorar la calidad de vida de los trabajadores y alinearse con tendencias internacionales. Aunque la transición será gradual, representa una transformación significativa en la cultura del trabajo en el país.
Un cambio esperado: ¿Por qué reducir la jornada laboral?
Actualmente, México tiene una de las jornadas laborales más extensas del mundo, de hasta 48 horas semanales, según la OCDE. Esto contrasta con países como Francia, Alemania y España, donde la jornada laboral ya está fijada en 40 horas o menos, priorizando el equilibrio entre trabajo y vida personal.

Los estudios han demostrado que una reducción en el horario laboral puede aumentar la productividad, reducir el estrés laboral y mejorar el bienestar general. En México, sindicatos y expertos han impulsado esta reforma como un paso necesario para fortalecer los derechos de los trabajadores.
¿Cómo será la implementación?
El gobierno de Claudia Sheinbaum ha anunciado que la transición se llevará a cabo de manera gradual, con la meta de completarse en enero de 2030. Entre junio y julio de 2025, se realizarán foros de consulta con trabajadores, empresarios y sindicatos para definir la mejor manera de aplicar la nueva jornada laboral sin afectar la productividad.
Principales cambios con la reforma:
- Límite máximo de 40 horas semanales.
- Dos días de descanso obligatorio por cada cinco trabajados.
- Revisión de esquemas de productividad y adaptación por sectores.
Impacto en la productividad y en los negocios
Las empresas han expresado opiniones divididas sobre la reforma. Mientras algunas consideran que la reducción horaria permitirá mejorar la eficiencia laboral, otras advierten sobre posibles dificultades en la adaptación, especialmente en sectores que dependen de largas jornadas de trabajo.
No obstante, la experiencia en otros países ha demostrado que reducir la jornada no afecta negativamente la economía si se aplica con estrategias adecuadas. En casos como Islandia, la productividad se mantuvo o incluso mejoró tras la reducción de la jornada laboral a 35 horas semanales.
Beneficios para los trabajadores
La transición a una jornada de 40 horas promete traer beneficios significativos:
- Más tiempo libre para la familia y el desarrollo personal.
- Reducción del agotamiento laboral y mejor salud mental.
- Mayor motivación y compromiso en el entorno de trabajo.

Además, expertos aseguran que este cambio podría impulsar una reconfiguración del mercado laboral, fomentando esquemas más flexibles como el trabajo remoto o el modelo de semana laboral de cuatro días en ciertos sectores.
México en la evolución del trabajo
La reducción de la jornada laboral es un paso crucial hacia un modelo de trabajo más equilibrado, adaptado a los desafíos de la actualidad. Con la consulta en marcha y el ajuste progresivo, México se prepara para una nueva era laboral que prioriza el bienestar sin descuidar la productividad.