En un nuevo episodio de tensión internacional, la marina israelí interceptó y retuvo el barco Madleen, una embarcación humanitaria que se dirigía a Gaza con ayuda médica y alimentos infantiles. A bordo viajaban 12 activistas internacionales, entre ellos la reconocida ambientalista Greta Thunberg y la eurodiputada francesa Rima Hassan Mobarak.
Interceptación en aguas internacionales
El Madleen, perteneciente a la Flotilla de la Libertad, había zarpado desde Italia el 1 de junio con el objetivo de romper el bloqueo impuesto por Israel sobre Gaza. Sin embargo, la marina israelí interceptó la embarcación a 200 kilómetros de la costa, en aguas internacionales, trasladando a sus ocupantes al puerto de Ashdod, donde actualmente se encuentran retenidos.
Reacciones y denuncias
Los activistas han denunciado que su detención fue un “secuestro en alta mar”, asegurando que su acción era completamente pacífica. Greta Thunberg, en un video pregrabado, pidió a sus seguidores presionar al gobierno sueco para exigir su liberación.
Por su parte, el ministro de Defensa israelí, Yoav Gallant, ordenó que los activistas vieran un documental sobre los ataques de Hamas del 7 de octubre de 2023, en los que murieron 1,200 civiles.
Israel minimiza la misión
El gobierno israelí calificó la travesía como “el yate selfie de celebridades”, minimizando la cantidad de ayuda transportada. Sin embargo, organizaciones como Amnistía Internacional y la ONU han condenado la acción como una violación del derecho internacional, al haberse realizado en aguas internacionales.